¿Para qué se deben dar a conocer los colectivos de poesía?
En Cali no hay una fuente de consulta reciente que aporte a los interesados en la poesía información acerca de las nuevas generaciones y colectivos que se han formado alrededor de esta cultura literaria. Existen varias versiones de cómo llegó la poesía a la ciudad y dos libros del siglo XX que intentaron hablar de historia como lo hicieron sus respectivos autores Juan Gustavo Cobo y Julián Malatesta.
En el libro ‘Poéticas del Desastre’ de 2003, Julián Malatesta incluyó obras de poetas relevantes de esa época que quería rescatar del olvido e hizo una crítica al contexto y se asemeja a lo que se pretende mostrar en este proyecto; puesto que su obra trata de llenar el vacío, la ausencia y desconocimiento de los poetas de esa época reseñando a cada uno con su obra.
Malatesta buscaba compilar en un solo libro algunas obras que existen aún en ciertas bibliotecas, pero también archivos de poetas que solo conocían sus familiares, dejando como resultado un registro de 99 poetas. Este libro también da indicios de que la línea de investigación literaria regional es poco tratada en Cali durante su periodo de investigación y a eso él le apostaba, visibilizar el talento local y el contexto de ese entonces.
Mientras que Gustavo Cobo en su libro ‘Historia de la poesía colombiana siglo XX’, hizo una recopilación similar de autores nacionales con sus respectivas obras, resaltando un análisis a la cultura de la época y el lenguaje mediante la belleza de la lírica y su percepción de ‘la poesía en un país en liquidación’.
Actualmente, me veo en la necesidad de contar la historia de cada uno de los 25 colectivos que existen en Cali más como una obligación periodística porque la historia si no se cuenta se olvida y es precisamente lo que ha pasado con todos los escritores caleños que por algún motivo se borró su nombre de la memoria de lo que hoy llamamos las nuevas generaciones.
A partir de los dos autores mencionados anteriormente quiero rescatar esa valentía de hablar de la poesía, que a pesar de los años, en el siglo XXI son los mismos jóvenes los que buscan de ella, la comparten y algunos no tienen el fin de lucrarse, sino por el contrario educarse y contar la historia que hay detrás de ella.
Un ícono representativo de la poesía en la ciudad es el Parque de los Poetas que fue construido en 1995 y planeado como un espacio abierto a distintos niveles sociales permitiendo la presentación de espectáculos públicos de todo género, se pensó además con este ofrecer un homenaje a la poesía vallecaucana y a los poetas Jorge Isaacs, Ricardo Nieto, Carlos Villafañe, Antonio Llanos y Octavio Gamboa, por habersen destacado en la literatura nacional e internacional.
Esas esculturas fueron hechas en lámina delgada de bronce (inicialmente se colocaron en color blanco y luego se les cambió a verde) bajo la dirección del maestro José Antonio Moreno.